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La serie televisiva Doctor Mateo ha convertido a la localidad asturiana de Lastres en todo un fenómeno turístico.
Este mes de agosto tuve la ocasión de disfrutar de un par de jornadas en la pequeña localidad marinera de Lastres, municipio de Colunga, en la comarca asturiana de la Sidra.
“Después de la serie de televisión del Doctor Mateo, esto se llenó de gente. Cada día se acercan más de tres mil personas a Lastres” me comentó el recepcionista de un reconocido hotal en la villa. Una frase que se repite entre los lugareños.
Incluso se ha creado una ruta turística, que atrae diariamente a muchas personas, con sus folletos en mano, que recorren y fotografian los edificios que aparecen en la serie de Antena 3 Televisión, como la Casa del Doctor Mateo (en realidad la casa del antiguo médico Pedro Villarta), de la maestra (que recrea la actriz Natalia Verbeke), u otros puntos turísticos como el Faro de Lastres, la Torre del Reloj, o los arenales de Lastres y La Griega.
Aparte de ser un puerto pesquero acogedor y hermoso, con buena gastronomía y varias zonas de interés, la publicidad de la serie de televisión se ha convertido en la gallina de los huevos de oro para esta localidad. Aunque en la serie la localidad se llama San Martín del Sella, los turistas no tardaron en identificar al antiguo enclave ballenero de Lastres y dirigir sus automóviles.
Y estos días de agosto, los coches no paraban de entrar y salir, los establecimientos hosteleros se abarrotaban de personas. Entre el laberinto de sus viejas casas, muy cuidadas y ordenadas, formando un balcón sobre el mar, se percibían grupos de personas, subiendo sus cuestas de piedra escarpadas.
Continuas referencias al Doctor Mateo (Gonzalo de Castro), a la taberna de Tom, y a sus protagonistas. Porque es cierto que Lastres es una villa aconsejable para visitar, con sus excelentes vistas, con el monte Sueve protegiendo el entorno, la hospitalidad y el buen ambiente, pero no deja de ser verdad que todo cambió (para mejor) desde que se encendieron los focos y se empezó a emitir la serie.
Este mes de agosto tuve la ocasión de disfrutar de un par de jornadas en la pequeña localidad marinera de Lastres, municipio de Colunga, en la comarca asturiana de la Sidra.
“Después de la serie de televisión del Doctor Mateo, esto se llenó de gente. Cada día se acercan más de tres mil personas a Lastres” me comentó el recepcionista de un reconocido hotal en la villa. Una frase que se repite entre los lugareños.
Incluso se ha creado una ruta turística, que atrae diariamente a muchas personas, con sus folletos en mano, que recorren y fotografian los edificios que aparecen en la serie de Antena 3 Televisión, como la Casa del Doctor Mateo (en realidad la casa del antiguo médico Pedro Villarta), de la maestra (que recrea la actriz Natalia Verbeke), u otros puntos turísticos como el Faro de Lastres, la Torre del Reloj, o los arenales de Lastres y La Griega.
Aparte de ser un puerto pesquero acogedor y hermoso, con buena gastronomía y varias zonas de interés, la publicidad de la serie de televisión se ha convertido en la gallina de los huevos de oro para esta localidad. Aunque en la serie la localidad se llama San Martín del Sella, los turistas no tardaron en identificar al antiguo enclave ballenero de Lastres y dirigir sus automóviles.
Y estos días de agosto, los coches no paraban de entrar y salir, los establecimientos hosteleros se abarrotaban de personas. Entre el laberinto de sus viejas casas, muy cuidadas y ordenadas, formando un balcón sobre el mar, se percibían grupos de personas, subiendo sus cuestas de piedra escarpadas.
Continuas referencias al Doctor Mateo (Gonzalo de Castro), a la taberna de Tom, y a sus protagonistas. Porque es cierto que Lastres es una villa aconsejable para visitar, con sus excelentes vistas, con el monte Sueve protegiendo el entorno, la hospitalidad y el buen ambiente, pero no deja de ser verdad que todo cambió (para mejor) desde que se encendieron los focos y se empezó a emitir la serie.
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